sábado, 8 de mayo de 2010

mi hijo

hay gente que me odia y hace bien y hay gente que me ama y hace mal. hay gente que me mima y que me odia y hay gente que me ama y que me mola y también hay gente que sencillamente no me dice hola :)

mi hijo. tengo un hijo de dos años, él dice que tiene tres, lo dice con tres dedos que son sus tres deditos de niño y dice que la leche y que el flan y dice que cuando sea mayor va a ser toro, o mosca, o bombero. yo le digo que informático o manipulador de alimentos y él dice playstation. playstation y caliéntame la leche cuando se acerca a mi dormitorio a las 2 de la mañana y me toca el hombro papá papá, leche, dice, leche y se va al sofá mientras hago todo lo que mi hijo necesita y se queda dormido. microondas.

mi hijo triunfará en la vida, será funcionario o albañil y con un poco de suerte acabará sus días sentado en la puerta de una parroquia con un vaso de cartón y por favor una ayuda para este pobre hombre. y vivirá muchos años y pasará a la historia por ser aquél y no tener miedo de andar a oscuras por los pasillos. mi hijo se sube a una valla de hierro y su madre que soy yo se levanta de la mesa, hijo, que te haces daño, ven que te explico, hijo, ven aquí, ay. y le quito la rebeca porque hace calor y me tomo una cerveza porque hace calor. 

hoy he dejado un libro en el suelo de una plaza y me he ido a desayunar, era un libro que regalaban con el QUÉ LEER y como no lo quería lo dejé por ahí tirado. lo que regalan con el QUÉ LEER es mierda, eso así de primeras, luego leí un par de párrafos y efectivamente, al suelo. después de desayunar vuelvo a pasar por el mismo sitio y veo a un señor no del todo bien vestido leyendo con interés ése libro que yo había despreciado. todo es igual, da lo mismo, la literatura que a unos les sobra otros la aprovechan. da igual lo que sea eso que llamamos literatura, si viene encuadernada y hay letras dentro en cierto orden lógico, hay gente que venga, lo que sea, y se pone a leer sin miedo a hacerse daño. me gustaría acercarme y explicarle ay que se hará daño y que así no ven que te explique, pero él ya es mayorcito. 

pues que aproveche.

viernes, 7 de mayo de 2010

comentario de Arturo que es como decir alguien que sea yo que es como decir mi gran amigo que es como decir el que conoce al que no se conoce

Este blog es mío y hago en él lo que me da la gana. Mi gran amigo Arturo ha escrito unos comentarios al post anterior que me han emocionado y quiero compartirlos más directamente con todos vosotros (saludo a la multitud). No voy a añadir más. Gracias amigo, doctor en la sombra.

"Ya quería escribir un poco. Iba a hacerlo en mi blog pero seguro que aquí lo lees antes. Total todo lo que escribo es casi en exclusiva para ti. Para mi lector. Será largo.

Ya quería escribir un poco la primera vez que leí esta entrada, empecé a hacerlo y tuve que dejarlo, me molestó bastante porque pensaba que todo lo que iba a decir no volvería a ser, pero he vuelto a leer la entrada y creo que vulevo a encontrar las palabras y las cosas.

En primer lugar el texto me parece maravilloso por momentos. Reconozco a mi amigo, soy un poco su doctor en la sombra y sé exactamente lo que pasa y cómo pasa y esas cosas que cuenta y por supuesto como es. A veces es un tipo que pasea cerca de la valla de un colegio y recuerda que él también era niño y poeta sin saberlo y a vece ses un tipo que tienen unos pelánganos largos y mucha barba y a veces no.

Cuando voy a comprarme ropa siempre me pregunto si esta camisa o este pantalón lo compraría Manolo, dónde comprará esas camisetas... Porqué yo no soy así.

El otro día estuve en su casa, quiero pensar que no fue la última vez que estuve en su casa. La única casa que yo puedo reconocer como suya y donde tengo recuerdos y puedo ser yo y poeta y llevar una camisa conservadora y antigua.

EL otro día fue muy especial porque estuve con él y me llevé unos libros de sus estanterías y ahora están en las mías y no parece gran cosa pero los miro y me acuerdo de mi amigo y pienso en las cosas que dice y en las cosas que piensa y no dice y en su tono de voz.

Me hizo muy feliz y me apena mucho que Parla ya no sea lo que era. Siento que me han robado un poco mi niñez y mis recuerdos, que han tirado la casa mágica del árbol

...EN su entrada Manolo sigue siendo él. Es decir es un niño y está sólo. Un niño que hace cojonudamente bien las cosas de los adultos y no me refiero a follar, que a mí eso plin, me refiero a su curro, porque el tío se lo curra y lo borda.
Pero a mí eso me da igual, a mi me gusta el Manolo niño, el Manolo que le explica amablemente a una señora como funciona la música del tren y esa imagen es, en concreto, un poema que tengo que escribir.

Es un niño que a veces se contradice. Nunca Salinger puede ser tu héroe, Salinger no te llega ni a la suela del zapato porque Salinger era un tío raro y uraño, y tu eres una persona muy normal, y sí, estoy de acuerdo las personas más normales son las más especiales del mundo.

Me sorprendes porque no te cuesta nada pasar la nochevieja con unos recienconocidos e integrarte y ser tú y pasarlo bien. Y luego, quizá puedes separar los buenos de los malos, los que convienen y los que no, pero como niño en principio lo primero es tu normalidad, luego ya se verá.


Tengo muchas más cosas que decir, pero ya lo haré cuando te vea, empecaremos a charlar de libros y de ideas y seremos contradictorios por el simple placer de la dialéctica. Seguro que se me olvida hablar de muchas cosas pero en el fondo da igual.

Por cierto sobre las páginas tediosas de la Montaña Mágica. Sí, existen esas tediosas páginas. En la parte central de la novela se abren una serie de conversaciones sobre la ciencia, la educación, el conocimiento, el tiempo, la ética.. entre Hans Castorp (el joven protagonista), Settembrini, un librepensador humanista que desea formar al joven en la ciencia y el conocimiento y un jesuita llamado Nafta. Pero son pocas páginas de 940 páginas de novelón auténtico. Creo que es la novela junto con La ocnjura de los necios donde me he sentido más atrapado por los personajes y sus vivencias."