lunes, 21 de septiembre de 2009

si soy más feliz me desintegro

Dejadme a solas, hoy quiero hablar de mí. Dejadme, que quiero estar conmigo, quiero mirarme, deshacerme, beber algo caliente en una taza. Me quiero a mí. Me amo. Me improviso en el word mientras me adoro y escucho a Brahms. Lo que uno escucha cuando escribe es parte íntima de la propia escritura. Depende del sonido y del ambiente el teclear frases más cortas o el uso de yuxtaposiciones y cosas. Punto y seguido. Dejadme hablar de mí sin decir nada, quiero escribir sin llegar a ningún sitio, contarme sin contar, relatarme los músculos y las articulaciones, el antebrazo, la fibra. Dejadme, por favor, dejadme ser quien soy quien quiera que yo sea. Quiero ser Yo. Dejadme. ¿Cuánto va a durar mi vida? Esto, ahora, aquí, durante, el momento presente, el tiempo que nos queda, la concatenación de pequeños cruces, los saludos, era joven, era un buen tipo, no hacía daño a nadie, qué desgracia, qué desgracia, deja mujer y dos hijos pequeños. Voy a decirlo: soy feliz. Lo repito: SOY FELIZ. Lo he descubierto, la felicidad, la alegría de estar vivo es exactamente esto: YO. Decirlo escribirlo gritarlo asomarlo al balcón repetirlo llamar por teléfono y afirmarlo, que sí, que es cierto, como lo oyes, ¿verdad? parece increíble, como te lo digo. Ser feliz es lo que yo soy, ser yo, ser un señor de ciento noventa centímetros de altura que tiene bajas las plaquetas. Vivo sin mañana, sin ayer, sin hoy siquiera, sólo vivo, el hecho en sí, el señalar cada latido y gritar AHORA!! ESTO!! ESTO!! ESTO!! AQUÍ!! Gritar cada latido y cada inspiración y sístole y mis pies sobre el parquet que está algo sucio. No voy partiéndome de risa por la calle, ni abrazando a todos los desconocidos, tampoco soy especialmente amable ni soporto a todo el mundo, pero no tiene nada que ver, dejadme que lo diga, quiero estar solo, mirarme fijamente, soy YO, y mi YO es todo lo que soy, lo que seré, dientes no completamente blancos, ojos marrones, la percepción creadora. Lo que veo es lo que existe, todo el mundo es para mí. Y lo meriendo. Dejadme una vez más que lo repita, quiero intentarlo, decir que para ser YO y ser feliz, basta con que tres o cuatro cosas vayan bien. No tengas miedo de decirlo. Tal vez mañana no seas tú, corre, date prisa, grítalo ya, no te mueras sin probarlo. Yo no me cambio por nadie. Cruzo los dedos.

2 comentarios:

Patricia dijo...

uis, anda... déjame ponerle banda sonora a tu post: http://www.youtube.com/watch?v=p2Gh1U14RZA

Anónimo dijo...

jo, a mí no me gusta MIKA!! pero bueno, lo cierto es que le pega.

besos!!!


DTB