martes, 22 de septiembre de 2009

RAZA BLANCA MIS COJONES

 Mi amigo Arturo es una perra. Este post lo escribo como respuesta al que ha escrito mi amigo aquí. Qué tiempos señores, qué tiempos. Yo he dado mi vida por el baloncesto, yo tengo los discos intervertebrales de la zona lumbar destrozados porque quería saltar mucho, el salto lo era todo, raza blanca tirador y unos cojones, yo era blanco matador, quería machacarla como me la machacaba en el váter, con rabia, con desesperación, con la entrega de un niño que sólo quiere ser el mejor en lo que hace. Mi padre me enseñó a ganar. Cuando era niño me echaba a la espala una mochila llena de azulejos y rodapiés de mármol y me dedicaba a subir y bajar las cuatro plantas de la casa de mi pueblo. Recuerdo que un buen día, en 4º de EGB me apunté a un equipo, botábamos el balón, dábamos pases, el primer partido de mi vida nunca lo olvidaré, NUNCA. Precisamente fue contra La Paz, el equipo de Arturo, La Paz era los Lakers y nosotros, C.P. JULIÁN BESTEIRO, éramos los Bulls con estrellitas amarillas alrededor del nombre. Cuando vi a un niño rubio en el polideportivo botando el balón por entre sus piernas mientras andaba y con la camiseta de La Paz supe que estábamos perdidos ¡yo no sabía casi ni botar el balón a palo seco! En fin, yo era alero, tenía el pelo que parecía el Dr. J y estaba negro como el cerote. Eso decía mi madre, hijo, lávate el cuello que lo tienes negro como el cerote. Me tiré desde 4º de EGB hasta los 25 años jugando al baloncesto sin parar. Por supuesto, conseguí mi objetivo, que era hacer mates, saltar, elevarme desde el suelo hasta hundir la pelota en un aro a 3,05 metros de altura. Yo machacaba, Arturo, machacaba!!! Cuando tenía 14 años calculé que a los 16 ya llegaría a machacar, pero creo que no fue hasta los 17. Luego a los 18 me jodí el tendón rotuliano de la rodilla izquierda, precisamente por hacerme el chulo haciendo mates. Tardé 2 años en recuperarme, pero ya nada volvió a ser igual, ni siquiera Maxi, que estuvo jugando en el gran equipo LA PATATA CALIENTE pudo, como entrenador mío en el gran ANATOLIA, despertar a la estrella que yo fui. Los mejores momentos de mi vida los he vivido con una pelota bajo el brazo. He jugado en Getafe, en Fuenlabrada, en Asturias, en Parla… y en mi pueblo, coño. No le pisaba, como Arturo, el huerto de las cebollas a mi abuelo, pero mi padre jugaba conmigo, generalmente iba en el equipo contrario (5 contra 5) y me soltaba unas hostias de padre (nunca mejor dicho) y muy señor mío. Baste decir que él fue profesional de balonmano y en la mili le apodaban Sansón. El caso es que a base de hostias aprendí. A veces hasta dejaba de jugar en medio de un partido y me iba a casa con los ojos brillantes de la mala leche que me entraba con las hostias que soltaba mi padre, me las comía todas. Uno de los mejores momentos, tal vez el mejor, fue en el torneo de 3 contra 3 de Fuenlabrada, a mis 17 años. Por ahí tengo alguna foto, llegamos a semifinales, teníamos que ser 4 (jugaban 3 y uno para los cambios) pero nosotros éramos tan chulos que sólo nos apuntamos 3, y de los 3, uno era un paquete, tipo Miguel (jajaja), así que éramos 2 y un paquete. Claro que de los 2, uno era MARCELINO NKO ROKU, un negraco de Guinea Ecuatorial que hacía lo que quería. Dios, hasta el alcalde nos felicitaba por los partidos que hacíamos!! En la semifinal eliminaron por faltas a Marcelino y me quedé yo solo con un paquete contra 3 cabrones hijos de puta, y nos ganaron por los pelos. Todavía me acuerdo de la gente que nos animaba sin conocernos de nada, vamos!! vamos!! y de las chicas, claro, uno quería jugar bien para gustarle a las chicas. Ahora uno sólo quiere escribir bien para gustarle a las chicas. Hay cosas que nunca cambian. El baloncesto era una forma de vivir. En el patio de mi cole, en 8º, perdí el conocimiento jugando al baloncesto, fue por culpa de un encontronazo, un niño me dio un cabezazo sin querer y me desmayé. Me salía sangre de la frente. A la semana ya estaba colgándome de una canasta. También me partí un brazo y jugaba hasta con escayola, tenía el brazo escayolado hasta el hombro, pero como era el izquierdo me apañaba para que Domingo y Pedro no nos ganaran a Juan Manuel y a mí. Ellos eran la pareja de oro del colegio, nosotros la de plata. Cuando jugaba en el SUR VILLAJUVENTUS, nos dimos de hostias contra el CUARTO KILO DE CHOPPED, fue una batalla campal, en ese equipo estaba el hijo del que por entonces era alcalde de Parla. Recibió como recibimos todos. Nuestro equipo era el que mejores jugadores individuales tenía, ellos eran el mejor equipo, ganaron la liga, nosotros quedamos segundos. Creo que nunca he ganado una liga. El baloncesto es vida, el baloncesto ha sido mi juventud. Teniendo examen de matemáticas, examen final, en el instituto, a las 3 de la mañana dejaba de estudiar porque era la final de la NBA, y lo veía hasta las 6, luego a seguir estudiando y al examen. Nunca saqué buenas notas en matemáticas. Tal vez este post no sea muy gracioso, no lo pretendo, el baloncesto es algo muy serio para mí y me jode en mi orgullo no poder jugar tan bien como antes, no llegar a machacar (sólo me agarro al aro, es decir, mariconadas), no clavarla desde la línea de tres, no tener un equipo, en fin, no jugar al baloncesto todas las semanas es algo que me entristece y que hace que mi vida sea un poquito peor. 

8 comentarios:

Kamikazeenamorado dijo...

Qué grande, me ha hecho recordar también un trocito de mi infancia-adolescencia. Pues nada, habrá que buscar una pista y empezar, aunque sea hasta que te pires.

Danilo T. Brown dijo...

NO HAY HUEVOS!!!!

Anónimo dijo...

Bueno Manuel. Si te molesta el comentario lo quitas, lo rompes o haces lo que te salga de los cojones pero yo ahora mismo voy a escribir, voy a escribir aqui ya que en mi blog no entra ni Dios y nadie leería lo que tengo que decir de ti. Decirle a todas esas personas que ahora te leen y te admiran y compran tus libros quién eres, de dónde vienes, cómo te conocí, porque creo que desde que te fuiste de Parla para evolucionar y experimentar y conocer y escribir, de veras que lo has hecho, lo has hecho y muy bien y se nota mucho que en esto de escribir ahora mismo estas agarrado del aro donde antes ni siquiera soñabas llegar y mañana seguro que estarás machacando desde la linea de personal. Y yo que te quiero, sabes que me alegro y lo sabes porque me conoces y sabes que tengo un corazón generoso que quiere a sus amigos que son pocos y tú uno de ellos.
Pero a lo que iba yo, a Manolo le conocí en el instituto (esto será largo) era un tío alto moreno y con un pelo a lo afro de la hostia. Yo dije este es un vacililla de tres al cuarto y entonces estuve en su casa y era un tipo genial que tenía un poster de Denis Rodman en su armario y en su cuarto hacia un calor de cojones y Marcelino no lo soportaba y le decía tronco tu cuarto es una puta sauna y yo de todo aquello ya escribía, ya me inspiraba un montón de letras el mamón de Manolo. Entonces yo le mostré la literatura de la misma forma que Damaso Alonso le regaló a Aleixandre el libro de Rubén Darío "AZUL" y entonces Aleixandre descubrió que era un poeta y Damaso añadió un poeta de cojones.
Bueno pues entonces Manolo vió que con la poesía, el baloncesto y su simpatía no había tía que se le resistiese y medio en serio, medio que había nacido con ello, empezó a escribir y luego conocimos al cocacolo y ya estoy desvariando, tengo un trancazo de cojones y me voy a dormir. Tronco que cuando vuelvas por aquí echate a andar a mi encuentro.

P.D. Al que quiere jugar al basket con Manolo que se prepare porque va a mear sangre. Con Manolo es mejor jugar al tenis o como hace ahora por Alicante, al Paddel (vaya mariconada) que en eso si que no da una porque yo con una mano rota le metí al tenis 6-0 6-0 lo que se conoce como una bicicleta.

ATH

Danilo T. Brown dijo...

Arturo, me sobrecoge leerte, me emociona que te acuerdes de esas cosas. De lo que yo no me acuerdo es de esa bicicleta, cabronazo. En nuestra amistad hemos compartido los momentos más grandes, algunos de los más grandes en los momentos más sencillos, SILENT HILL, GTAIII, las noches en las que bebíamos y escribíamos y pintábamos cuadros, óleos, con las manos y yo manchaba la alfombra y el sofá con pintura verde y granate. Y tu rompías una copa de cristal y escribías un poema "ya está rota la copa, los pilares con los que sustenta..." o algo así.
caminaré a tu encuentro, te daré un abrazo a ti, y un beso a tu mujer y a tu pequeña.

TE QUIERO

Sansón dijo...

Todo lo que dice Danilo s cierto, quiza se le olvido decir tambien que antes de empezar a jugar a baloncesto podia haber entrado en los infantiles de futbol del equipo de Parla (igual hubiera tenido mas futuro que en el baloncesto), no le hizo caso a su padre y en vez de hacerse primero un atleta completo para estar compensado y fuerte y asi dedicarse al deporte que le apasionaba y en el cual tenia buenas maneras, pues se paso de rosca como vulgarmente se dice y asi vinieron las lesiones etc etc.
---De todas formas digo como Arturo el que se ponga a jugar con Danilo va a mear sangre, pues lleva los genes de su padre, que tras jugar en un equipo de 3ª division de futbol, en uno de primera devision de balonmano, y estar jugando hasta los cincuenta y tantos al futbol sala, tuvo que dejar el deporte y dedicarse a realizar otro tipo de actividades casi deportivas.
---No me acuerdo de las hostias que te daba jugando al baloncesto, pero siempre estuve orgulloso de ti como deportista, efectivamente quiza fue un defecto mio el enseñarte que en cualquier clase de juego habia que ganar, eso de jugar por jugar no valia.
---Repito estoy muy orgulloso de ti como deportista y por todo lo demas.
---En el padel tu tranquilo solo sufrira la cintura por tener que agacharte mucho por eso Aznar que es pequeño juega mejor a eso.
---Pero como tu dices en tu articulo, blanco o( moro inflitrado) eso lo digo yo, con dos cojones machacaras a cualquiera.
---Un abrazo y continua como puedas pues los años no pasan en balde y hay que ir ajustando nuestras distracciones deportivas a nuestras cualidades fisicas que van variando

Rubén GoMo (Radioboy+) dijo...

Yo con manolo prefiero jugar a tocarme jajajajajaja

Tom dijo...

Jejeje yo tambien me acuerdo de las palizas que me dabas jugando en la pista del colegio en el pueblo, creo que todas las ostias que te daba tu padre me las devolvias a mi... Al menos yo puedo decir que me sacabas mas de una cabeza ;)
Como te dije el otro dia hecho de menos aquellos tiempos, mucho.

Anónimo dijo...

No puedo, no puedo dejar de contestar a Sansón. Ese Sansón que tiene uno de los blogs más cojonudos que existen. Lasrutas de Sansón. Ese Sansón que me cague en él cuando me llevo a ver Cazorla medio cojo, ese Sansón padre que está ciego con su hijo y no se da cuenta que para el fútbol Manolo era un tronco mal talao coño. Todavía recuerdo cuando Manolo me dijo que tenía un sistema para no perder nunca al fútbol y era poniendo a todos los jugadores debajo de la ortería con las manos en alto. Joder por más que intenté explicarle que si tu levantas las manos en el area y un jugador tira el balón a tu mano es penalti, él que no que no era penalti porque era el del otro equipo el que tiraba a tu mano. Nada que no tiene ni guarra de fútbol. Ni le interesa Sansón dice que es el circo dle pueblo y tal y tal.

Abrazos Arturo