miércoles, 20 de mayo de 2009

diarios de la paroxetina nosécuántos

Pues venga, no me apetece un carajo escribir pero como dice el literato morboso que hago yo cuando no tengo ganas de escribir voy a escribir que no tengo ganas de escribir, o no, mejor escribo que mañana a las 7 de la mañana me largo a Madrid, me iba a ir esta tarde, pero es que ha llegado mi libro a la librería y ya me ha entrado el nervio y me he puesto a colocarlo bonito y que se vea y he diseñado unos cartelitos promocionales que he intentado subir al blog pero no me deja este aparato. Y para comer me he tomado una caña (sólo una mamacita linda, sólo una cervecita fresquita) con un bocadillo de salchichas con tomate y queso ñam ñam joder qué hambre me ha entrado ahora mismo, creo que en cuanto termine de escribir esto que estoy escribiendo sobre que no tengo ganas de escribir y que mañana me voy a los medriles y que he comido y he bebido pero poco y con moderación, digo que cuando termine me voy a ir a comer algo, algo comestible, de buena gana le comería los morros (con perdón) a una que yo me sé, pero habrá que dejar que se mustien un poquito durante unos cuantos días que luego están más ricos, perdón por la digresión, que esta noche toca fiesshhhta porque se ha empezado a vender y he empezado a dedicar mi libro y a día de hoy todo gira en torno a eso a mi ombligo de palabras autopoéticas y penes con alas como compresas Ausonia. En Madrid, el viernes, comeré con la señorita ITZ, digo yo, espero que se acuerde, porque así se lo dije, oye, este viernes comemos cuando salga del médico y de paso me lo cuentas todo sobre la señorita LOPRU y luego quedaré con ASMP para tener un "momento Madrid" y debería también buscar un hueco en Malasaña para ver a Clara, claro, y el sábado digo yo que iré al Pepe Botella a dedicarle un ejemplar a mi querida Juana la Loca que tanto me aconsejó y tan bien cuando este libro era un proyecto y por eso sale en mis agradecimientos de la última página porque soy muy agradecido, gracias, gracias, gracias también a usted, y no sé por qué cuento aquí lo que haré en el futuro próximo cuando debería contar lo que hice en el pasado inmediato, ayer, esta mañana, hace media hora, bueno, hace poco más he estado tomando café con bailys (no se escribirá así pero paso de mirarlo en google) con J, que trabaja en Saxo y con su compañera pero de su nombre no me acuerdo y con Mili. La del nombre del que no logro acordarme tenía un tatuaje en el antebrazo derecho, unas letras en árabe con unas filigranas, ponía GRANADA, y, qué casualidad, en ese momento me llama mi prima Patri, de Granada, que le compre un ejemplar y se lo dedique y que se lo de a mis padres para que se lo lleven al pueblo. A mi abuela le ha encantado la portada, bueno, no, está escandalizada, me ha desheredado, ya no me quiere ver, ya no me draá la paga de fin de año, ni me hará croquetas, joder, por otro lado, mi madre tiene amigas a las que tendrá que regalarle el libro forrado de papel para que no se vean las pollas voladoras y no piensen que el hijo, su hijo, el hijo de mi madre, es decir, yo, para que no piensen, digo, que soy un guarro o un degenerado, pero el caso es que lo soy, sí, lo siento, mamá, tu hijo es un poco salido, es listo, escribe bien si se pone, tiene una mente creativa como pocas (uf!) y es un buen mozo, pero sí, ha salido a su padre, y es un guarrete, pero hay que quererme tal cual soy, yo intento comer bien y crecer fuerte, escribir cosas bonitas, pero últimamente sólo escribo poemas guarros a las camareras y a la mujer del tiempo de Antena 3.

1 comentario:

Odal Orto dijo...

Me lo has recordado, así que aquí va:

Escribo. Escribo que escribo. Mentalmente me veo escribir que escribo y también puedo verme ver que escribo. Me recuerdo escribiendo ya y también viéndome que escribía. Y me veo recordando que me veo escribir y me recuerdo viéndome recordar que escribía y escribo viéndome escribir que recuerdo haberme visto escribir que me veía escribir que recordaba haberme visto escribir que escribía y que escribía que escribo que escribía. También puedo imaginarme escribiendo que ya había escrito que me imaginaría escribiendo que había escrito que me imaginaba escribiendo que me veo escribir que escribo.

(Salvador Elizondo, El grafógrafo)

Hala.